Este trabajo es un pequeño homenaje a El Eternauta de Oesterheld y Solano López, reinterpretado desde una mirada contemporánea y migrante. Inspirado en la adaptación audiovisual de 2025, retomo a Juan Salvo como símbolo de resistencia frente al desastre, y lo ubico junto a una nueva figura: el repartidor inmigrante, inspirado en tantos hermanos venezolanos que, como yo, transitan el duro proceso de migración. A través del frío, la nieve y el trazo, dibujo cuerpos que resisten, cargan y habitan una ciudad hostil, tejiendo una memoria gráfica donde el cómic, la historia y lo personal se cruzan.


Cada vez que le comentaba a alguien que le estaba dedicando un rato de mis sábados a pintar un mural en Isla Maciel, la mayoría de las personas abrían los ojos, expresando su preocupación por aquel lugar ubicado al otro lado del riachuelo, cerca de La Boca. ¿Qué lugares nos habremos perdido de conocer por los ojos y comentarios de los demás? Este lugar se llama isla sin serlo, tal vez porque está apartado del continuo de la ciudad y rodeado por viejas fábricas que el tiempo ha dejado demoler. Conocí gente que quiere ser un punto de encuentro entre el agua y la tierra, entre estar lejos pero conectados y, sobre todo, en búsqueda constante de ser visibles y existir.
Planeación y diseño por: Lean Frizzera y Gerardo Montes de Oca





Trabajo sobre prendas negras como si fueran lienzos ocultos. Uso decolorante textil como herramienta de revelación: no agrego color, lo arranco. Cada trazo es una herida precisa que transforma la tela en superficie viva, quemada, vibrante. Estas piezas mezclan lo simbólico con lo visceral, lo ornamental con lo urbano. Me interesa lo que se borra, lo que resiste, lo que permanece. Estampar con lavandina es mi forma de dibujar con el tiempo.







En torno a la obra existencialista de Arthur Schopenhauer, con referencias expresionistas y de
inmersión interactiva física y digital, busco sumergir al público en un momento contemplativo en torno al dolor y su presencia constante en nuestra vida.
La obra usa los principales arquetipos de liberación, el “genio” representando la mirada interna y
contemplativa de las heridas propias en el cuerpo, y al “altruista” representando la mirada hacia
afuera donde las heridas sanan a través de conectarnos con el sufrimiento de los demás.
Las imágenes brindadas para producir estas sensaciones están ligadas a mis vivencias propias y
representaciones sensoriales del dolor, usando mi cuerpo como escenario.



Este trabajo es un pequeño homenaje a El Eternauta de Oesterheld y Solano López, reinterpretado desde una mirada contemporánea y migrante. Inspirado en la adaptación audiovisual de 2025, retomo a Juan Salvo como símbolo de resistencia frente al desastre, y lo ubico junto a una nueva figura: el repartidor inmigrante, inspirado en tantos hermanos venezolanos que, como yo, transitan el duro proceso de migración. A través del frío, la nieve y el trazo, dibujo cuerpos que resisten, cargan y habitan una ciudad hostil, tejiendo una memoria gráfica donde el cómic, la historia y lo personal se cruzan.


Cada vez que le comentaba a alguien que le estaba dedicando un rato de mis sábados a pintar un mural en Isla Maciel, la mayoría de las personas abrían los ojos, expresando su preocupación por aquel lugar ubicado al otro lado del riachuelo, cerca de La Boca. ¿Qué lugares nos habremos perdido de conocer por los ojos y comentarios de los demás? Este lugar se llama isla sin serlo, tal vez porque está apartado del continuo de la ciudad y rodeado por viejas fábricas que el tiempo ha dejado demoler. Conocí gente que quiere ser un punto de encuentro entre el agua y la tierra, entre estar lejos pero conectados y, sobre todo, en búsqueda constante de ser visibles y existir.
Planeación y diseño por: Lean Frizzera y Gerardo Montes de Oca





Trabajo sobre prendas negras como si fueran lienzos ocultos. Uso decolorante textil como herramienta de revelación: no agrego color, lo arranco. Cada trazo es una herida precisa que transforma la tela en superficie viva, quemada, vibrante. Estas piezas mezclan lo simbólico con lo visceral, lo ornamental con lo urbano. Me interesa lo que se borra, lo que resiste, lo que permanece. Estampar con lavandina es mi forma de dibujar con el tiempo.







En torno a la obra existencialista de Arthur Schopenhauer, con referencias expresionistas y de
inmersión interactiva física y digital, busco sumergir al público en un momento contemplativo en torno al dolor y su presencia constante en nuestra vida.
La obra usa los principales arquetipos de liberación, el “genio” representando la mirada interna y
contemplativa de las heridas propias en el cuerpo, y al “altruista” representando la mirada hacia
afuera donde las heridas sanan a través de conectarnos con el sufrimiento de los demás.
Las imágenes brindadas para producir estas sensaciones están ligadas a mis vivencias propias y
representaciones sensoriales del dolor, usando mi cuerpo como escenario.


